Sí, ya sabemos todos y todas que eso de que el cine sea de un año sí y otro no depende de los intereses y las distribuidoras, ¡cuántas pelis hechas con talento y mimo se quedan sin poder llegar hasta nosotros espectadores ávidos de algo que nos llene, algo que nos sorprenda, nos menee y nos epate!
Estos meses atrás se puede decir que en la Boute aux Cailles (para quien no lo sepa es un barrio de París del que Catherine es fan) han caído unas cuantas películas no vistas y estrenadas en 2007 como:
FAST FOOD NATION de Richard Linklater, BORRACHERA DE PODER, de Claude Chabrol, monstruosa la Huppert, una maravilla, INLAND EMPIRE, de David Linch, llámenme rarita pero me ha resultado muy estimulante, LA VIDA EN ROSA de Olivier Dahan , un encargo melodramático hasta el paroxismo con una solvente Marion Cotillard, y mi favorita, la que más me ha llegado junto con la del Sr. Chabrol, PROMESAS DEL ESTE de David Cronenberg, y no, no es solo porque salga Viggo Mortensen en toda su armónica anatomía, haciendo de impecable chófer ruso al servicio de una poderosa familia mafiosa.
El tandem Cronenberg Mortensen vuelve a funcionar. Al director canadiense le ha salido una película que podría haberse filmado hace 70 años como dentro de 100. Promesas del Este es oscura y clásica, heróica sin caer en la épica, depurada, rítmica y sin pirotecnias narrativas (dios, es de agradecer), violenta, como debe ser, de rabias y afectos descontrolados que hacen que la tensión vaya creciendo hasta su desenlace. ¿Qué nuestro director se nos está haciendo viejo? puede ser, pero sigue siendo su firma, fíjense si no en el muñeco de la recién nacida o en como nunca aparta la cámara de lo que interesa.
Averiguar quienes somos es lo más complicado que nos puede tocar en la vida y aquí cada personaje lo hace a su manera. Necesito saber quien eres, le dice la quijotesca Anna a Nikolai en un momento de la película. En el filo, los sentimientos se desnudan, la fricción de dos mundos dan muy buen resultado. Un ángel ha bajado a los infiernos, un cuento de hadas dentro de la laguna del hedor eterno. Promesas del Este es esa peli de la que una se acuerda pasados unos cuantos años, nada fácil... nada fácil. Más cine, por favor.
7 comentarios:
Rarita
je je.
Odio a Hollywood, Séverine.
Quiero hacer cocteles molotov y tirarlos a diestra y siniestra por Sunset Strip.
Cariñosamente,
N. Desmond.
Bueno, tiene su morbillo, los Oscar está sobrevaloradísimos pero pasa con todo, con los vaqueros, la cocacola (donde esté una horchata fresquita...), son así,y nosotros unos borregazos, no cabe duda que Bisnes is Bisnes mai fren.
Por lo pronto yo me apunto sus recomendaciones: tiene usted un gusto impecable, querida.
Promesas del Este me parecio superdecepcionante. Todo el mal que se construye alrededor del personaje de Morgnestern al final no va a nada. Al final es bueno del amor. Un malo bueno.
No estoy de acuerdo, el mal esencial es el capo y entre este y la rubia había que colocar a otro. de todos modos el vuelco del final si está de más. Es un cuento de hadas, ya lo dije.
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