Aunque la discapacidad emocional es una cosa muy vieja, también los nuevos tiempos nos soprenden.
"…La imagen del ricacho más joven del planeta dándole compulsivamente al F5 al final de la Red Social domina la cosecha cinematográfica de 2010. La demoledora soledad del magnate Mark Zuckerberg, todo un misterio existencial, perfectamente canalizado através de la musculatura derrumbada e Jesse Eisenberg, sintetiza una de las grandes paradojas de nuestro tiempo: la discapacidad emocional de quienes ahora mismo mueven los hilos de la nuevas formas de interacción humana. En otras palabras, la película de David Fincher con guión de Aaron Sorkin, desvela que tras la mayor maquinaria jamás creada para hacer amigos se esconde un misántropo macerado en la bilis de su cósmica soledad…"
Jordi Costa. Los raros ganan
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